Resumen
La finalidad fundamental de la
enseñanza de las matemáticas es el desarrollo del razonamiento y la
abstracción, así como su carácter instrumental. Las matemáticas están
vinculadas a los avances que la civilización ha ido alcanzando y contribuyen al
desarrollo y a la formalización de las Ciencias Experimentales y Sociales. Por
otra parte, el lenguaje matemático, es un instrumento eficaz que nos ayuda a
comprender mejor la realidad que nos rodea y adaptamos a un entorno cotidiano
en continua evolución. En consecuencia, el aprendizaje de las matemáticas
proporciona la oportunidad de descubrir las posibilidades de nuestro propio
entendimiento y afianzar nuestra personalidad, además de un fondo cultural
necesario para manejarse en aspectos prácticos de la vida diaria, así como para
acceder a otras ramas de la ciencia. La resolución de problemas debe
contemplarse como una práctica habitual, que no puede tratarse de forma
aislada, sino integrada en todas y cada una de las facetas que conforman el
proceso de enseñanza y aprendizaje. El ciudadano del siglo XXI no podrá ignorar
el funcionamiento de una calculadora, con el fin de poder servirse de ella,
pero debe dársele un trato racional que evite su indefensión ante la necesidad,
por ejemplo, de realizar un cálculo sencillo mentalmente. El uso indiscriminado
de la calculadora en los primeros años de la vida de las personas impedirá que
los alumnos adquieran las destrezas de cálculo básicas que necesitan en cursos
posteriores. Por otra parte, la calculadora y ciertos programas informáticos,
resultan ser recursos investigadores de primer orden en el análisis de
propiedades y relaciones numéricas y gráficas y en este sentido debe
potenciarse su empleo.
Abstrac
The fundamental purpose of the teaching of mathematics is the
development of reasoning and abstraction, as well as its instrumental character.
Mathematics is linked to the advances that civilization has achieved and
contribute to the development and formalization of Experimental and Social
Sciences. On the other hand, mathematical language is an effective instrument
that helps us to better understand the reality that surrounds us and adapt to a
constantly evolving everyday environment. Consequently, the learning of
mathematics provides the opportunity to discover the possibilities of our own
understanding and strengthen our personality, as well as a cultural background
necessary to handle practical aspects of daily life, as well as access to other
branches of science. Problem-solving should be seen as a standard practice,
which cannot be treated in isolation, but integrated into each and every facet
of the teaching and learning process. The citizen of the twenty-first century
cannot ignore the operation of a calculator, in order to be able to use it, but
should be given a rational treatment to avoid their helplessness to the need,
for example, to perform a simple calculation mentally. Indiscriminate use of
the calculator in the early years of people's lives will prevent students from
acquiring the basic calculus skills they need in later courses. On the other
hand, the calculator and certain computer programs, turn out to be resources of
first order researchers in the analysis of properties and numerical and
graphical relations and in this sense their use should be enhanced.
Resumen